El equipo científico que ha investigado la cópula del insecto, y que esta semana publica sus extensas conclusiones en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences', sostiene que se trata de una técnica sumamente eficaz, a pesar de que el macho se expone a dañar a su pareja.
Pero no sólo el macho ha evolucionado para mejorar la técnica reproductiva, desarrollando el pene espinoso. La hembra también ha adaptado su aparato reproductor a las peculiaridades de su pareja, y con el tiempo ha desarrollado una gran fortaleza en el tramo de su vagina que 'acoge' las embestidas.
El equipo dirigido por Johanna Rónn ha examinado siete especies de escarabajos y gorgojos, y en todos la conclusión es la misma: las hembras aprenden a sobrellevarlo a base de endurecer los músculos, aunque el dolor es difícil de evitar.
Foto: Johanna Rönn/PNAS (Vista del pene por un microscopio).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario